♣ OPERACIÓN CÓNDOR TAMBIÉN LLEGÓ A SAN MARTÍN HOY REGIÓN SAN MARTÍN (Segunda Parte)

Por Edgardo Vásquez Arbildo, Gran amigo y Maestro y ante todo luchador social, que sufrió también la genocida "Operación Cóndor" 

EDGARDO VÁSQUEZ 

 ARBILDO

               

OPERACIÓN CÓNDOR TAMBIÉN LLEGÓ A SAN MARTÍN Y AL RESTO DEL PERÙ

2da. Parte: Nuestro traslado de Tarapoto a Lima.

Era ya el miércoles 9 de junio 3 de la tarde, segundo día sin comer y sin beber una gota de agua, habíamos perdido el apetito y el beber, quizá por el estado de ánimo y la incertidumbre, por no saber a dónde nos llevarán, lo que me obligó, preguntarle al oficial de la PIP, un hombrón moreno y limeño, a donde nos llevarán, contestándonos a Lima a seguridad de Estado; oiga usted lo replique; por el amor a sus padres a su esposa e hijos; permítame escribir una pequeña carta a mi esposa, madre de cuatro hijos, avisándolos que nos encontramos bien en Tarapoto con rumbo a Lima a seguridad del Estado; que ni él sabía por cuánto tiempo y que avisará a los familiares de los colegas en Moyobamba y a la vez en Lima, el oficial aceptó, con la condición de leer la carta al final, para luego entregar al amigo chofer Zoilo Ocloche, quien conocía a la familia por ser Moyobambino cumplió el encargo.

Era ya las 4 de la tarde, el CÓNDOR, convertido en un avión de la FAP, llegaba con una misión muy hambriento para devorarnos; llevaba mucha gasolina en galoneras, en pleno vuelo se voltea uno de ellos derramándose un tanto la gasolina y lo insólito fue, que en mi bolsillo había una cajita de fósforos, pese de no ser fumador, lo saqué del bolsillo y a la vez un palito de fosforo, listo para encender y prender el fuego a la galonera; provocando un gran incendio en pleno vuelo, explotando el avión en mil pedazos; pero milagrosamente me detuve al solo pensar, que nadie conocería lo sucedido y allí terminaba todo.

Cinco de la tarde, llegando al aeropuerto de las palmas, propiedad de la FAP, donde nos esperaban un carro blindado, con muchos policías, listo a trasladarnos de inmediato a Seguridad de Estado, en la Av. España, y yo iba por primera vez a Lima y en avión expreso, el oficial hizo los tramites respectivos; para dejar constancia escrita que nos estaba entregando a otro personal; quien ordeno que nos llevarán al tercer piso de la prisión; oh que sorpresa de bienvenida, 242 presos políticos de todas partes del país; nos recibían con arengas y saludos fraternos y combatidos; habiendo entre ellos un médico y un sacerdote, ofreciéndonos una variedad de frutas, para saciar el hambre y la sed de dos días; nos apretujaron en una celda cuatro por cuatro a doce personas, como palitos de fosforo en su pequeña caja.

Estuvimos en la celda que dejó el combativo maestro del SUTEP, Prof. Horacio Zevallos Gámez, quien había sido deportado a España.   

3era. Parte: 75 días en prisión, nos acusaban de agitadores sociales…..