jueves, 20 de agosto de 2009

POESÍA: BANDERA DE EEUU, SÍMBOLO DE CONFLICTO BÉLICO

Una hermosa poesía que abraza a todos los pueblos del mundo e invoca la unidad contra el imperio. Enviado por César Cando Mendoza (futepichincha@hotmail.com)
ESA BANDERA “Quito, febrero (AFP) Grupos de estudiantes protagonizaron disturbios contra la Embajada Norteamericana, en el centro de esta capital, como señal de protesta por las declaraciones que hizo el Embajador sobre el conflicto bélico que actualmente viven Ecuador y Perú. Los revoltosos lanzaron piedras al interior del edificio de la Embajada y lograron dañar los ventanales e inclusive la bandera. La policía consiguió dispersar a la multitud con gases y disparos de fusil a…” (1981) No es la bandera del Viejo Lincoln, es de Robert Mcnamara; de Luter King no es la bandera, tampoco de Angela Daivis, es de los Nixon, es de la Fundación Ford. Es la insolente bandera que flamea a un costado de mi Pichincha herido y delante de mi casa de flores y palomas. Es la bandera petrificada de odio, transnacional bandera. No es la bandera de las manos cesanteadas, del overol y la corbata que deambulan por las calles de acero; no es del niño rubio, ni del negro, nunca del chicano, no del boricua. Es la bandera que precede al desembarco, la que lanza obuses contra el polen y el rocío. Es la bandera petrificada de odio. transnacional bandera. Es la negra bandera de la Casa Blanca, bandera de los caza bombarderos, de los Plymouth y Spartanberg Country que hunden sus fétidas pezuñas en mi nítida agua al sur del río Bravo. Es la bandera de Ronald Reagan -ilustre orangután jubilado en Hollywood-, de David Rockefeller, la CIA y Pentágono, de la AFL-CIO enferma de elefantiasis. Es la bandera petrificada de odio, transnacional bandera. No es la bandera de los trece emigrantes que en Arizona murieron calcinados, nunca del patriota torturado, tampoco del que huye en estampida del fascismo por cuidar el pétalo de paz y el beso inalcanzable. Es la bandera corsaria que en ilícito drenaje roba la fuerza de trabajo de mi gente. Es la salteadora del cobre y la bauxita, del estaño y el setenta y cinco por ciento de las extracciones petrolíferas. Es la bandera petrificada de odio, transnacional bandera. No es por supuesto la bandera de la libertad; absurdo decir que es de la paz, y vil injuria identificarla con la verdad. Es la bandera incolora, bandera que ha trocado sus estrellas por misiles, la que sirve de lecho al dólar y la guerra, la que gusta de los besos lascivos de tiranos, la que insiste astutamente fraccionarnos, la que hondea mojigata en la OEA. Es la bandera petrificada de odio, transnacional bandera. Ya entiendes ahora, compañero, ¿por qué me enojo al ver esa insolente bandera que flamea a un costado de mi Pichincha herido y delante de mi casa de flores y palomas? César Cando Mendoza Quito, Ecuador, marzo de 1981

1 comentario:

  1. Bakan !! Excelente ... Politica Yanqui de expansión son un plaga de imbeciles, su hegemonía es un idiotes ... La Lucha Latino Americana sigue adelante ...
    Att Rockozo Alemán

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