La situación de los derechos de los pueblos indígenas a la tierra, al territorio y a su cultura, elementos que reclaman o preservan desde hace siglos y que en estos días tienen enorme actualidad en el Perú, estará en el centro de la IV Cumbre Continental Indígena, a iniciarse mañana en la ciudad de Puno. La articulación continental de las luchas indígenas por la construcción de estados nacionales con desarrollo social, se perfila como el objetivo central de la IV Cumbre Continental de Pueblos y Nacionales Indígenas del Abya Yala, a realizarse del 27 al 31 de mayo en Puno. En una fase inicial, se desarrollarán la I Cumbre Continental de Mujeres Indígenas, el II Encuentro Continental de Juventud Indígena y el II Encuentro de la Niñez Indígena del Abya Yala, cada una con delegaciones y temáticas específicas. El total de participantes es estimado en cinco mil, de los cuales un millar serán delegados de todo el continente, además de algunos representantes de Europa, como delegados del País Vasco y Catalunya, en España; Asia y hasta África. Las delegaciones que generan mayor expectativa son las de Bolivia, el único país con un presidente indígena, Evo Morales; México, Ecuador y Guatemala, por ser los que mayor número de población originaria tienen. El nombre de Abya Yala se debe a que este es el que los antiguos americanos le daban al continente y el apelativo fue usado también en las tres cumbres anteriores, realizadas en México, Ecuador y Guatemala “Las voces originarias del continente se unen en un acto común de defensa de la Madre Tierra. Ya pasamos de la resistencia a la construcción del poder, hemos demostrado que tenemos propuestas para la sobrevivencia de toda la Humanidad. Los Pueblos y Nacionalidades Indígenas revaloramos nuestras raíces para impulsarnos juntos hacia un futuro de Buen Vivir para todos y todas”, dice el documento base de la reunión, señalando el rumbo de las deliberaciones. La Cumbre principal se desarrollará del 29 al 31 de mayo, con paneles y mesas de discusión, los primeros dedicados al tema de la construcción de estados plurinacionales y a la meta del Buen Vivir, es decir el derecho de los pueblos al desarrollo. Las mesas temáticas tratarán sobre la plurinacionalidad, el estado nacional comunitario, la libre determinación y el gobierno propio y las autonomías que propugnan sectores derechistas en Bolivia y Ecuador como instrumento de enfrentamiento a los procesos de cambio que viven esos países. Otra tema de gran trascendencia es la del Buen Vivir, que pondrá en el banquillo la crisis del desarrollo y de la civilización capitalista y la deuda ecológica, la hecatombe ambiental y la justicia climática. Los delegados discutirán igualmente sobre la situación de los mecanismos de integración subregional, como la Comunidad Andina de Naciones, la Unión de Naciones Sudamericanas y el Mercado Común del Sur. También serán materia de las deliberaciones los tratados de libre comercio con Estados Unidos, la Unión Europea y otros, frente a proyectos regionales como la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de América (ALBA) y el Tratado de Comercio de los Pueblos (TCP). La presencia depredatorias de las transnacionales petroleras y mineras, así como de las que explotan la madera y el agua, será tratada en la mesa sobre territorialidad, que abordará igualmente el problema de las privatizaciones, la soberanía alimentaria, el respeto a la hoja de coca, las semillas transgénicas y los agrocombustibles, rechazados por el movimiento indígena. Otra mesa estará referida a los derechos indígenas a la consulta y consentimiento previo de decisiones que les competen, y al análisis de los instrumentos internacionales de protección de esos derechos, con énfasis en los referidos a la niñez, la juventud y las mujeres indígenas. En el mismo ámbito se tratará la situación de los pueblos transfronterizos, sobre todo amazónicos, cuyo hábitat es dividido por fronteras nacionales, y los pueblos en aislamiento voluntario y en vías de extinción. El análisis se extenderá a otro grave problema que enfrentan los nativos en diversos países, es el de la militarización y la criminalización de la protesta social y de los propios pueblos indígenas, así como la instalación de bases extranjeras en territorios aborígenes. La mesa tratará igualmente los casos de genocidio y la creación del Tribunal Permanente de los Pueblos Indígenas. Habrá además una mesa temática dedicada a la organización e integración de los pueblos indígenas y, en este tópico, se evaluará los avances hacia Coordinadora Continental de Pueblos Indígenas del Abya Yala y la posible creación de una “Organización de Naciones Unidas Indígenas” La educación, la cultura y la ciencia tendrán una mesa dedicada a la descolonización del saber, la deuda cultural y la transmisión intergeneracional; la educación intercultural, bilingüe y laica; los sistemas de salud indígenas, y el conocimiento tradicional, la biopiratería y el patrimonio intelectual. Otros temas fundamentales a tratar son las experiencias de organización política indígena, el racismo, la discriminación y la estigamatización contra los originarios, así como la migración nacional e internacional. La violencia intrafamiliar, social y política y el desplazamiento forzoso; los problemas de los indígenas en las ciudades, víctimas de la economía informal, el pandillaje, las drogas, las enfermedades de transmisión sexual, la prostitución, la trata de personas, la mendicidad y otros. Los delegados tratarán, asimismo, sobre las cosmovisiones indígenas y el tema de las iglesias y el eurocentrismo. Personalidades invitadas
Este importantísimo evento continental contará, asimismo, con la participación de la Premio Nobel 1992, Rigoberta Menchú, y además han sido invitados los presidentes de Perú, Alan García, Bolivia, Evo Morales y Ecuador, Rafael Correa; aunque ninguno ha dado señas de querer o poder asistir. Según informó a este diario Janio Gora, miembro de la Comisión Organizadora, entre las delegaciones que confirmaron sus asistencia se encuentran Ecuarunari y el movimiento Pachacutic y Kichwas de Ecuador con el dirigente Humberto Cholango a la cabeza, Movimiento Sin Tierra (MST) de Brasil, Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos, Conuaq y otras organizaciones de Bolivia, Ontic de Argentina, Onic de Colombia y los mapuches y quenches (Chile), a los que se suman representantes de Guatemala, Estados Unidos, México y otros países. Miguel Palacín Quispe, vocero de la IV Cumbre, destacó el desarrollo de este encuentro, afirmando que “Los pueblos indígenas del continente tenemos la responsabilidad histórica de hacer que la IV Cumbre Continental de Pueblos y Nacionalidades Indígenas sea un paso decisivo para que nuestra visibilización se transforme en incidencia efectiva para el pleno ejercicio de nuestra identidad y nuestros derechos”, sostuvo. En momentos coyunturales de demandas amazónicas peruanas, Palacín señaló que los pueblos indígenas buscan vivir de lo que nos da la naturaleza, pero sin dañarla. Según los organizadores, son unos 200 periodistas acreditados hasta el momento, entre ellos 36 extranjeros, para asistir a esta IV Cumbre. Aparecen registrados enviados especiales de la BBC de Londres y de Nacional Geographic de Estados Unidos. La Cumbre contará con dos salas de prensa equipadas para los representantes de los medios de comunicación nacionales y extranjeros. La oficina regional del Ministerio de Relaciones Exteriores facilitará el ingreso de las delegaciones que lleguen por la frontera sur (Tacna y Puno). Desde el domingo último se realizan actividades previas a la IV Cumbre, como el pago a la Tierra en el local de la Municipalidad Provincial de Puno. Ayer se efectuó un pasacalle de sensibilización por las principales arterias de la ciudad. Y hoy día, víspera de la cita mundial, se instalarán stands para los participantes en una feria de artesanos. La Comisión Multisectorial de la IV Cumbre Continental de Pueblos y Nacionalidades Indígenas, integrada por instituciones públicas y privadas como los ministerios de Relaciones Exteriores y del Interior y el Ejército Peruano, tiene la misión de garantizar la seguridad, atención y alojamiento de los más de 1500 nativos participantes del hemisferio. El gobierno regional de Puno y el concejo provincial de esa ciudad declararon a la IV Cumbre de interés para sus jurisdicciones, incluso la IV Brigada de Montaña del Ejército ha ofrecido sus instalaciones para el alojamiento a las delegaciones. La ciudad de Puno tiene capacidad para albergar a cien mil personas. La Policía Nacional, Defensa Civil, el Serenazgo Municipal y el Cuerpo de Bomberos voluntarios, se han comprometido a brindar la seguridad. El Hospital Regional Manuel Núñez, el Policlínico Municipal, EsSalud y estudiantes voluntarios de las facultades de Medicina y Enfermería de la Universidad del Altiplano han instalado carpas en el campus y balones de oxígeno en los alojamientos para los asistentes que requieran atención, debido a la altura, de 3,800 metros sobre el nivel del mar, y al intenso frío. Vilma Escalante Redacción La Primera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario