DÍA DE LA MADRE O EL DESMADRE CONSUMISTA CAPITALISTA

Por carlos Villacorta V. Forjando la Sociedad Superior DIA DE LA MADRE O EL DESMADRE CONSUMISTA CAPITALISTA Es curioso informarse que, tanto el día del padre como el día de la madre se inventaron en EEUU, centro del consumismo: Por un lado, el origen del Día del Padre se debe a Sonora Smart Dodd, una mujer estadounidense que, en 1909, en honor a su padre que se quedó viudo y tuvo que afrontar el cuidado de sus 6 hijos, decidió crear este día para honrar su memoria. Otro tanto sucedió con Ana Jarvis en 1905, a la muerte de su madre a quien tanto quería ¿Y quién no? Decidió crear un día en su honor. Lo primero que hizo fue enviar cartas a cuanto político podía y a personas influyentes solicitando apoyo para que el día de la muerte de su madre, el 2º domingo de mayo se consagrara su celebración como un día especial para todas las madres. En 1912 logró que se creara la Asociación Internacional Día de la Madre con el objetivo de promover su iniciativa. En 1914, el Congreso de Estados Unidos aprobó la fecha como el Día de la Madre, decretando “Fiesta nacional”, el Presidente Woodrow Wilson, apoyó la medida en toda su integridad. Finalmente, en un reportaje antes de su muerte, Ana Jarvis, mostró su disconformidad con la forma como se estaba utilizando ese hermoso día que impulsó, pues dijo que jamás imaginó que este día fuera utilizado más bien mercantilmente y no con el fin que ella había idealizado. El desmadre consumista capitalista El capitalismo se ha adueñado de fechas importantes para bombardearnos de publicidad consumista recordándonos impetuosamente, egoístamente y sin ningún control, que es obligatorio regalar para demostrar nuestros sentimientos. En guetos cercados de opulencia, se despilfarra; mientras los pobres carecen de lo básico. La publicidad penetra en nuestra inteligencia emocional, se apodera de ella y la desequilibra; ya está especializada en lo que podría llamarse comunicación emocional. La simbología audiovisual nos hace sentir simpatía y admiración, sembrándonos el deseo y la obsesión por lo que estamos viendo. Pero, lo peor no está ahí, sino en el estilo de vida que promueven y se adueña de nuestras mentes, adiccionándonos al consumismo. Estilo de vida insostenible socialmente y económicamente para la gran mayoría que se ve afectada en su salud mental ante la impotencia de no poder hacer un regalo conforme se ve en la TV. Este modelo de consumismo, irracional e insostenible, incrementa cada año, junto al aumento de la crisis capitalista estructural, ambiental y social. Se educa y se pretende perennizar una ideología basada en el consumismo, lo que obliga necesariamente a la lucha y forja de una educación transformadora en perspectiva de la Sociedad Superior. Este análisis sin embargo, afianza también nuestros sentimientos hacia nuestra madre, presente o ausente, asumiendo el compromiso de hacer todo lo necesario para que viva en una Sociedad Superior y ese ¡FELIZ DÍA MAMÁ! Sea algo real y práctico. El mejor día de la madre es no consumiendo nada.