El trato inhumano a los que son sometidos cientos de trabajadoras de algunas empresas de ese sector llega a extremos inimaginables. En condiciones que recuerdan las peores épocas de la esclavitud, jóvenes y madres de familia han sido obligadas a trabajar más de doce horas sin moverse de su lugar y a usar pañales desechables para que no “pierdan tiempo” en ir al baño.
El caso, que está siendo investigado por la congresista Marisol Espinoza, se estaría repitiendo en por lo menos dos agroexportadoras, una de ellas identificada por la parlamentaria nacionalista como Camposol S.A., perteneciente a la noruega Dyer Coriat Holding y que opera en el departamento de La Libertad.
Lo extraño es que, a pesar que esta situación, aunada a una serie de violaciones de los derechos laborales, fue puesta por Espinoza, el 23 de enero del 2008, en conocimiento del entonces ministro de Trabajo, Mario Pasco, hasta el momento la empresa no ha sido sancionada.
“El miércoles 20, aprovechando su presencia en la Comisión de la Mujer, donde fue invitado el ministro Jorge Villasante le solicité información sobre la indignante situación que viven las mujeres que trabajan en Camposol S.A. y que son obligadas a usar pañales desechables para que no tengan que ir al baño, pero me respondió que no conocía del tema y se comprometió a indagar sobre ello”, dijo la legisladora a LA PRIMERA.
Conforme a denuncias interpuestas en el Tribunal Permanente de los Pueblos, durante la cita paralela a la Cumbre América Latina-Europa, en mayo del año pasado, Camposol viola el derecho a la seguridad social, impone regímenes de contrato temporal y paga salarios menores al sueldo mínimo.
Al respecto, Espinoza denunció que esta empresa hostiliza a los trabajadores con más de cinco años de servicios y obliga a trabajadores antiguos a tomar “descansos temporales” sin fecha de retorno, reemplazándolos por trabajadores nuevos. En otros casos los presiona a firmar renuncias y para ser recontratados como “nuevos”.
Despiden a gestantes
“Hay discriminación también contra las trabajadoras gestantes, a quienes despiden o no les renuevan contrato y, peor aún, no pueden atenderse en el seguro. El Sindicato de Trabajadores de la Empresa Camposol S.A. ha denunciado que la trabajadora Milena Gonzales Paredes, con 18 meses de trabajo, fue despedida con 5 meses de embarazo. Sufrió un aborto espontáneo, según el médico por la situación de estrés”, expresó.
El secretario general del sindicato, Walter Campos, confirmó a LA PRIMERA que estos casos vienen sucediendo hace más de seis años y el hostigamiento contra los dirigentes es constante. “El caso de las mujeres que fueron obligadas a utilizar pañal es real, pero hasta donde tenemos entendido ya no se da. Esa situación indignante fue denunciada hasta el año pasado”, comentó.
Rosa Parihuanchui, dirigente sindical despedida, reveló que Camposol comete estos atropellos al amparo de la Ley 27360, Ley de Promoción Agraria, que recorta los derechos laborales de los que laboran en ese rubro. Por ello -dijo- debe ser derogada.
Chlimper, Alan y Camposol
Al respecto, Miguel Calisaya, director de políticas laborales de la Asociación Aurora Vivar, que investiga la situación laboral de las mujeres esparragueras, señaló a este diario que la referida ley siempre tuvo nombre propio, pues fue dada por José Chlimper cuando era ministro de Agricultura.
“Fue una ley dada en la época de Fujimori con nombre propio, ya que Chlimper es dueño de Agrokasa”, aclaró.
Según una fuente que pidió discreción, Chlimper tendría intereses también en Camposol; mientras hay rumores que vinculan al propio presidente Alan García con esta agroexportadora.
Virú y Talsa en el ojo de la tormenta
Esta situación ocurre también en otras empresas agroexportadoras, sin que el Ministerio de Trabajo intervenga. Según el Sindicato de Trabajadores de la Empresa Sociedad Agrícola Virú S.A., la empresa sociedad agrícola Virú S.A., propiedad de Miguel Nicolini, con más de 4,300 trabajadores, despide y cambia de sus puestos a los obreros con la clara intención de alejarlos de sus dirigentes y facilitar el despido.
Marcial Polo, secretario de Defensa del citado sindicato fue despedido por un error de trabajo que no tenía la gravedad que justificara tal sanción.
A pesar que Virú S.A. ha sido antes sancionada por incumplimientos en materia de seguridad y salud en el trabajo, la empresa sigue incumpliendo con las medidas de prevención, como capacitación, mantenimiento de equipos y supervisión oportuna. Asimismo, hace ingresar a los trabajadores a los campos recién fumigados cuando los químicos aún están en el ambiente, con perjuicio a su salud.
De otro lado, la empresa Talsa S.A., que forma parte del Grupo Rocío, y principal vendedora de ‘espárragos frescos o refrigerados’ -según el sindicato de Talsa- no cumplió con pagar utilidades, pese a que abastece de materia prima a la Sociedad Agrícola Virú y otra parte de su producción está centrada en el Valle del Mantaro.
Marco Cáceres
Redacción
La Primera
GLOBALIZACIÓN Y MODERNA ESCLAVITUD::
ResponderEliminarEscándalo. PARA NO CREER: Agroexportadora Camposol obligó a trabajadoras a usar pañales desechables para que no pierdan tiempo en ir al baño.