EL PERRO DEL HORTELANO SALIÓ MORDIENDO

El perro del hortelano salió mordiendo Paco Muguiro Ibarra S.J. El otro día, a propósito de los acontecimientos en Bagua, alguien de Lima preguntaba a una persona que vivía en Jaén: “Pero qué es lo que verdaderamente pasó en Bagua?” La persona le contestó: “Que el perro mordió al hortelano” Efectivamente, el hortelano no solo se quedó sin las verduras que el perro no le deja comer, sino que le mordió, y herido comprueba que se quedó sin el perro, y es posible que se quede sin la legitimidad sobre el huerto, de seguir las cosas así.. Porque cada vez hay menos personas que crean en él. Que el gobierno está en crisis lo ha demostrado la falta de decisión en la renuncia de los dos ministros más implicados directamente en el conflicto de Bagua, la falta de propuesta, durante varias semanas, para designar al nuevo primer ministro, y la carencia total de ideas para recrear la dirección del gobierno. Lo único que se ha escuchado, y a través de Expreso, ya no de El Comercio, es que lo que está detrás del perro del hortelano es un complot internacional y una guerra fría. Toda esta situación hace que haya bajado 10 puntos en las encuestas y que para subir unos cuantos números, con los recursos de la cosecha de años anteriores, conceda a todos los empelados públicos, FFAA y FFPP 500 soles de gratificación por Fiestas Patrias. De lo que nos alegramos todos. Con esta medida va a subir unos puntos, pero quedan intactos los problemas. Mientras tanto y como escondido entre las noticias del asesinato pasional de la folklorista Alicia Delgado, sale en libertad el ex ministro del gobierno aprista anterior Rómulo León Alegría, con lo que las promesas de luchar contra la corrupción caen por los suelos. Se dice que es costumbre, en todos los gobiernos, que los que dirigen, siempre reciben algo, por lo bajo, de las concesiones que se hacen a las transnacionales. Pero en los gobiernos con una fuerte oposición es más difícil hacerlo, que en este, donde la oposición es débil. Se dice también que no lo reciben una o dos personas, sino desde el que hace el trato hasta el de más arriba y en aumento, en cuanto a la cantidad de dinero que se recibe. Por eso es que cuando salieron a la luz los petroaudios, renunció todo el gabinete, como diciendo: “Renunciando todos deslindamos y salimos limpios de este caso”. Pero lo que entendían las personas de la calle, era que se renunciaba para que las investigaciones no fueran más adelante, y pudiera caer hasta el Presidente de la República. El Presidente también deslindó llamando a los responsables ratas. Pero este hecho, que es considerado como gravísimo por el gobierno, mucho más grave que los acontecimientos de Bagua donde murieron 35 peruanos y hubo más de 200 heridos y no renunció nadie, este hecho que fue el causante de la renuncia de todo un gabinete, se desdibuja y pierde toda su fuerza, como castigo a la corrupción, cuando a los pocos meses vemos salir con libertad condicionada, al principal responsable, y cuando se comprueba que ninguno de los argumentos utilizados por el juez son suficientes para ese tipo de tratamiento. Con razón Álvarez Rodrich dice: “¿ Por qué un juez puede hacer mal su trabajo? Solo por tres motivos: incapacidad; pérdida de autonomía, por la presión de algún poder; o por dinero. Creo que, en este caso la primera razón debe descartarse” ( La República, 11-07-09) Además el Presidente de la Corte Suprema Javier Villa Stein, el Vocal Cesar San Martín y otros “ Todos coincidieron en que la labor del juez Barreto, a cargo de los petroaudios , produce legítima sospecha” (Ibid) Con todos estos hechos, parece que el perro va cumpliendo cada día mejor su rol no de impedir que se coma, sino de cuidar el huerto, para que de otras maneras más participativamente consensuadas, y con otros hortelanos podamos comer, no unos pocos, sino todos los peruanos/as y de una manera sostenible.