LA EDUCACIÓN EN EL PERÚ 3. INICIO REPUBLICANO

Por Carlos Villacorta V. Continuando con la cruzada en perspectiva de una educación transformadora. Es fundamental saber las bases con la que se fundan, particularmente en el Perú, lo que sigue son algunos argumentos del edificio educativo que se construye. La educación en el Perú. Inicio republicano Las nuevas clases dominantes de la naciente República, mostraron sus verdaderas entrañas parasitarias y burocráticas sin capacidad de dirección e iniciaron con fuerza el endeudamiento externo e interno porque de ella reciben jugosas regalías para provecho personal, asimismo también iniciaron sus actividades comerciales con el concurso y la llegada de elementos del extranjero principalmente ingleses, aprovechando la gran apertura liberal establecida. San Martín dio el Reglamento Provisional de Comercio el 28 de setiembre de 1821. Luego increíblemente se reimplantó “El Tributo a los Indios”. Sentando las bases de una realidad económica peruana enfeudada al imperio del capital privado extranjero, lejos muy lejos del desarrollo productivo, la industrialización, la tecnificación y procesamiento de nuestras ricas y abundantes materias primas, dando como resultado un Estado burocrático incapaz de impulsar los cambios de esas estructuras. Sistema que lo defienden a muerte. Todos los gobiernos de turno sean militares o civiles, dictadores o democráticos que se han sucedido hasta la actualidad, no han hecho otra cosa más que defender esos intereses. Unos más otrso menos. La educación por cierto, no es ajena a la defensa de esos intereses; ha evolucionado sin materia de atención a no ser para ajustarse a las cambiantes clases dominantes y sus intereses. Ese es su marco económico evolutivo: La inautenticidad. La revista “Realidad Económica”-Buenos Aires. Argentina. Nº.202, del 16 de febrero al 31 de marzo del 2004. En un importante artículo “Deuda Externa” de Jorge Francisco Cholvis, encontramos: San Martín “Inició el recorrido de la vida internacional para el reconocimiento de la independencia y también la gestión de algún empréstito” “Si bien planteó no honrar las deudas anteriores, pero sí generó las futuras” En efecto San Martín planteó las deudas que se debían “honrar”. Según el Estatuto del Protectorado los que “Hayan sido contraídas para mantener la esclavitud del Perú” no se reconocen. El mismo autor en la revista señala: “Según Bolívar San Martín contrajo deudas con “cláusulas leoninas” para sostener la guerra contra España” “Luego se contrajeron nuevas deudas para pagar vencimientos anteriores y así se gestaba la primera crisis de la deuda externa”. Este problema económico, ideológico y político, se va a reflejar en todo el proceso republicano hasta hoy, cuya responsabilidad está y sigue estando en los criollos “conservadores” y “liberales”, tronco de los partidos y grupos “independientes” actuales que se acomodaron y se acomodan a las circunstancias, sin tomar en cuenta los hechos y el futuro del país, sólo sus intereses personales y de grupo, menos tomar en cuenta a los verdaderos hacedores de la historia peruana: El mundo andino, mal catalogados de “indígenas”, quienes si pusieron el pecho por la libertad y murieron masivamente por ella. Por eso, es también brutalmente injusto que ciertos personajes figuren en la historia, incluso como protagonistas principales de la independencia, como si hubieran estado solos. Increíblemente se les rinde culto cada 28 de julio, cuando fueron otros (Nuestro pueblo andino) los que escribieron la historia con su vida y su sangre. Preguntamos: ¿Quiénes fueron despojados de sus bienes con la invasión genocida española? ¿Quiénes tenían como cárcel su propio país? ¿A quién liberó realmente la independencia? ¿No fueron acaso a los “indígenas”, a los campesinos, al mundo andino en general? ¿Acaso no se proclamó la independencia a su nombre? ¿Por qué entonces no se les restituyó sus bienes, por qué no se les devolvió, si fueron ellos los que fueron robados? Sin embargo hasta estos momentos no se les reconoce ese derecho. No se les ha reparado sus bienes y riquezas que les fueron arrebatados. ¿Cuándo se hará verdaderamente justicia? Hay que recordar que la justicia se conquista no se mendiga. Que el real Inkarri es el pueblo que junta sus organizaciones, las etnias que se juntan, la cultura andina que se unifica y en un solo torrente como un huracán alcanzan su autentica libertad. Libertad andina popular. Educativamente “El Protectorado” sólo creó un conjunto de instituciones básicas, sin una política educativa centralizadora. El 23-02-1822 decretó la fundación de escuelas en todos los conventos, cuyos maestros serían nombrados por los obispos. Por ejemplo, para los marinos también se creó la “Sociedad Patriótica” (1822). Meses después, el 6 de julio de 1822 se decretó la creación de la primera Escuela Normal, bajo la dirección del inglés Diego Thompson, en cuyo Artículo 4 diría: “En el término preciso de seis meses, deberán cerrarse todas las Escuelas Públicas de la capital cuyos maestros no hayan adoptado el sistema de enseñanza mutua”. Que era el Método Lancasteriano traído de Inglaterra, que consiste en el principio de una educación compartida, donde lo alumnos-monitores orientan la instrucción de los chicos en los cursos inferiores en forma escalonada, de arriba hacia abajo, por sus características necesitaba de una disciplina severa. Para su difusión se encarga a la “Sociedad Patriótica”. Leer más en http://www.educared.org.ar/infanciaenred/antesdeayer/files/Graciela%20Iragui.pdf El 14 de abril de 1825, Simón Bolívar, hace público un informe donde se señalaba el completo abandono en que se encontraba la educación. El 23 del mismo mes y año crea la “I Dirección General de Estudios”, para encargarse de la educación nacional. Pero, la educación de ellos, los nuevos dueños. Ha de notarse, que no se toca para nada el mundo andino, dejando a un lado nuestros rasgos culturales, nuestra cultura andina, nuestras nacionalidades, costumbres, lengua quechua, pese haberse proclamado la independencia a nombre de ellos. Supuestamente se desarrolla “una nueva educación”, que, paradójicamente la Constitución de 1823 señala: “La instrucción es una necesidad común y la República la debe igualmente a todos los individuos”. En la práctica permanece la educación de casta, de privilegios, dictada en los colegios privados y parroquiales bajo el poder del clero. Cambian las palabras, los actores, pero no los beneficiarios, ni la esencia que seguía feudal-colonial. Y. si UD. sabe mirar mi querido lector, aquello no es cosa del pasado. Es nuestro presente, con otros actores, en otras condiciones, con toda y globalización como quieran. En el Perú desde los inicios de la República han estado siempre en colusión y pugna colosal, la derecha dividida en dos: Conservadores y liberales. Una educación “democrática” feudal-colonial (Conservadores), contra la “democrática” burguesa- liberal (Liberales). Finalmente acabaron su desarrollo en paralelo, manteniéndose y socavándose, convirtiéndose en liberales o conservadores según la ocasión. Por esta razón, nuestra mentalidad feudal es la atmósfera nacional. Pese a la predominancia actual de un capitalismo subyugado al capital privado internacional, la mentalidad feudal es hegemónica. Ese es el trajín de nuestra educación durante toda la República, con todas sus particularidades del momento. La media verdad y la mentira, el olvido y el silencio, ha sido el ritmo de la clase dominante y el poder. Prometer y no resolver.

Casi 200 años de vida republicana, vienen prometiendo resolver los mismos problemas, de educación, hambre, miseria, exclusión, falta de equidad. Etc. Sus “políticos” de turno, sin ningún pudor, vienen repitiendo y prometiendo lo mismo desde hace exactamente 188 años de vida republicana. ¿Acaso no se hace vital una educación transformadora y, una Sociedad Superior?

Fortalecer el análisis con: http://www.yachay.com.pe/especiales/7ensayos/ENSAYOS/Ensayo4A.htm